Significado de la epilepsia

      Comentarios desactivados en Significado de la epilepsia

La epilepsia es el nombre genérico de una serie de trastornos nerviosos de diversas etiologías, que tienen en común un síntoma característico y frecuente: convulsiones más o menos generalizadas. Este grave trastorno neurológico afecta a unos 60 millones de personas en todo el mundo.

Durante un ataque epiléptico, el cerebro envía señales incorrectas, y estas señales pueden limitarse a este lugar o pueden propagarse. Si las señales son limitadas, es un ataque parcial. Sin embargo, si la convulsión se expande a ambos hemisferios del cerebro, la convulsión es generalizada. La epilepsia no se transmite por contacto, es decir, no es contagiosa. Aunque una cura definitiva es difícil, muchas personas toman medicamentos que controlan este trastorno neurológico.

Si conoce a una persona epiléptica y está presente durante una convulsión que dura menos de 5 minutos, no hay necesidad de llamar a un médico. Asegúrate de que esté en una posición cómoda y que su ropa no esté ajustada. Si la persona está babeando, ponga su cabeza a un lado para que no se ahogue con su saliva. Entonces pon una almohada (o un abrigo) bajo la cabeza de la persona y espera a que pase la crisis. No intente sujetarlo ni arrojar agua a la víctima. Es importante saber que después de una crisis, es normal que la persona se desoriente y se confunda. Intenta calmarlos y llévalos a casa.

También existe la epilepsia jacobina, una forma parcial o focal de epilepsia, caracterizada por contracciones unilaterales localizadas en una extremidad o una región determinada del cuerpo y debido a la irritación de las vías nerviosas motoras, generalmente a nivel de la corteza cerebral (tumor, callo, cicatriz, etc.).

La epilepsia también puede afectar a los animales, por ejemplo, la epilepsia canina aparece como una secuela de las enfermedades nerviosas (por ejemplo, el muermo) o de forma independiente, en parte como ataques epilépticos.

Tipos y síntomas de la epilepsia

Hay dos tipos de epilepsia: la epilepsia tónico-clónica, también conocida como el gran mal; y la epilepsia larvaria, conocida como el pequeño mal.

La epilepsia tónico-clónica es una enfermedad crónica, a menudo hereditaria, caracterizada por convulsiones generalizadas. Puede ser anunciado por una sensación característica llamada aura y tiene tres fases principales: la fase tónica, a veces precedida por un aura característica (siempre idéntico gesto o sensación) que anuncia la convulsión y alerta al paciente (el paciente pierde el conocimiento y cae, con las mandíbulas apretadas, los músculos contraídos, los ojos entornados, se muerde la lengua y a menudo hay una pérdida de orina y heces); la fase clónica, en la que todo el cuerpo es sacudido por movimientos convulsivos; y la fase resolutiva, en la que el paciente está en coma, con respiración sibilante, expulsando por la boca una espuma sanguinolenta.

Epilepsia larvaria, o una pequeña enfermedad, raramente acompañada de convulsiones, cuyos principales síntomas son los mareos y, sobre todo, las frecuentes ausencias de corta duración. A veces se observan movimientos musculares involuntarios.

Posibles causas

En muchos casos, es difícil indicar la causa de la epilepsia. Sin embargo, se sabe que la epilepsia puede tener su origen en un traumatismo craneal, el uso de algunos medicamentos, una malformación cerebral, complicaciones durante el trabajo de parto, abuso de drogas o alcohol, derrames cerebrales, enfermedades como la meningitis, trastornos del metabolismo, tumores, etc.

En el caso de la epilepsia fotosensible, una convulsión puede ser desencadenada por luces brillantes o tenues, privación del sueño, ansiedad y ciertos estímulos visuales en los videojuegos.