S.M.J. (o s.m.j.) es una abreviatura utilizada en el ámbito jurídico cuyo significado es “salvar el buen juicio”. Tradicionalmente se coloca justo debajo de la conclusión de una opinión, por ejemplo, utilizando la frase “s.m.j. es la opinión”.
Cuando se redacta una opinión jurídica, el creador de la opinión (que da la opinión) utiliza esta abreviatura para indicar que la conclusión a la que ha llegado no es suprema. No es la única o definitiva respuesta. Es decir, si otro creador de opinión va a apreciar las opiniones del documento, puede adoptar un punto de vista diferente al expuesto.
Otras formas comunes que aparecen en el cierre de una opinión son: “esta es nuestra opinión”, “así es como nos parece”, entre otras similares. Normalmente, por tradición, el creador de opinión añade la abreviatura junto a las frases finales.