Una relación abierta es un tipo de relación en la que dos personas están involucradas pero están “abiertas” a la posible implicación física con otras personas.
En una relación abierta, no existe un sentido de exclusividad, y las dos personas están de acuerdo en que pueden relacionarse con otras personas sin que esto se considere traición o infidelidad. Este tipo de relación se considera una alternativa a las relaciones basadas en la monogamia, el tipo de relación más común hoy en día.
Para muchas parejas, una relación abierta es una filosofía de vida, sinónimo de “amor libre”, lo que significa que la gente se hace cargo de su relación, pero si conocen a gente interesante, no dejarán pasar la oportunidad.
Contrariamente a lo que mucha gente puede pensar, una relación abierta requiere reglas y normas bien establecidas. Estas reglas serán diferentes dependiendo de cada pareja, pero al menos deberían existir algunas reglas básicas. Por ejemplo, algunas parejas definen que su pareja sólo puede involucrarse con otra persona cuando no están juntos. También pueden estipular que no pueden involucrarse con los amigos del otro. Un área muy importante en las relaciones abiertas es la salud. Una persona siempre debe protegerse a sí misma, especialmente cuando hay más de una pareja, para evitar las enfermedades de transmisión sexual. Las mentiras y omisiones pueden hacer que una pareja pierda la confianza. No deberías estar en una relación abierta si no puedes ser sincero sobre tu relación con otra persona. Para evitar las mentiras, muchas de estas parejas evitan hacer preguntas concretas.
Por supuesto, hay gente a favor y en contra de las relaciones abiertas. La gente en contra dice que una relación abierta es un acto de promiscuidad, sin reglas, sin respeto, donde “nadie pertenece”. Mucha gente cree que los que aman de verdad no podrían estar en una relación así. Sin embargo, los que están a favor ven una relación abierta como una relación sincera con reglas y compromiso, admitiendo que en casi todas las relaciones monógamas a la gente le gustaría el tipo de libertad que ofrece una relación abierta. Muchas personas en relaciones abiertas rechazan la comparación con el simple hecho de “quedarse”, argumentando que quedarse es una actitud que no revela ningún sentido de compromiso, lo que sucede en las relaciones abiertas.
Una de las parejas más famosas y una de las primeras en asumir su relación abierta fue la de Sartre y Simone de Beauvoir, que estuvieron casados por más de 50 años, hasta la muerte de Sartre.