La reingeniería es un sistema estratégico de reestructuración organizativa y administrativa, con el objetivo de reformular las actividades de una empresa determinada para que pueda ser más competitiva en el mercado.
La idea central de la reingeniería es la “reinvención” de la organización, eliminando las prácticas y costumbres que han quedado obsoletas y, a partir de estudios y planes, adaptándose a nuevos mecanismos de producción, nuevas actividades, procesos e incluso nuevos productos.
Esta estrategia fue desarrollada por Michael Hammer y James Champy, ambos del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), a mediados de la década de 1990.
La reingeniería suele aplicarse en tres escenarios diferentes: cuando la organización se enfrenta a momentos de crisis; cuando no está en crisis pero quiere evitar probables problemas en el futuro; o cuando quiere mejorar su rendimiento, sin necesidad de prever crisis futuras.
Independientemente de la situación, el primer paso de la reingeniería es el estudio y el análisis de toda la información relativa a la organización, el proceso o la función que se quiere mejorar.
La reingeniería puede centrarse tanto en el contexto organizativo, es decir, en todos los aspectos de la organización, como en la reestructuración de un proceso, cargo o función específicos.
Reingeniería y reducción de tamaño
Algunos críticos relacionan la reingeniería con la reducción de personal, debido a que también implica el recorte de la mano de obra de los empleados como una alternativa para evitar costos.
La reducción de personal se suele aplicar como estrategia de reestructuración organizativa en tiempos de crisis, centrándose en la eliminación de los costos de emergencia.
Véase también: el significado de Downsizing y Rightsizing.