El Fénix es un ave legendaria de la mitología griega, que murió, pero después de algún tiempo renació de sus propias cenizas. El pájaro fénix, antes de morir, estalló en llamas, y luego renació.
El fénix poseía una gran fuerza, capaz de llevar cargas pesadas durante su vuelo, llegando incluso a transportar elefantes. Según la mitología, las lágrimas del fénix tenían características curativas.
En la Antigüedad, el fénix era venerado por varios pueblos, como los egipcios, especialmente los habitantes de Heliópolis, donde el fénix era visto como la reencarnación del dios Ra.
El ave fénix también tiene el poder de convertirse en un ave de fuego muy similar a un águila. Por su diferente muerte, el ave fénix se ha convertido en un símbolo de fuerza, inmortalidad y renacimiento. Es una de las figuras más representadas por la gente que hace tatuajes en el cuerpo.
Se cree que el pájaro mitológico apareció en el Este, y luego fue adaptado por los griegos. Incluso la Iglesia Católica tenía una relación con el ave fénix, los cristianos creían que el ave era uno de los símbolos de la resurrección de Cristo. Se decía entonces que las cenizas del ave fénix eran tan poderosas que incluso podían resucitar a los muertos.
Origen del Término Fénix
El nombre fénix es en realidad un concepto erróneo de un historiador griego, que confundió el nombre de la palmera, que se llama fénix en griego, con el nombre del verdadero pájaro.