La materia orgánica es el compuesto formado por restos vegetales (hojas, ramas, raíces, cortezas, etc.) y animales (en menor medida) que conforman el suelo .
La materia orgánica, al descomponerse por la acción de los microorganismos, forma el humus, un compuesto de color oscuro que, debido a sus elementos nutritivos, tiene gran importancia para el suelo, aportando fertilidad a las plantas.
La materia orgánica junto con los minerales, el agua, el aire y varias criaturas diminutas como los hongos, las bacterias y las hormigas, los gusanos, las termitas, etc., transforman el suelo en un organismo vivo. El suelo compuesto de materia orgánica se transforma en una esponja, llena de canales, por los que circulan el aire y el agua, reteniendo los nutrientes y facilitando su absorción por las raíces de las plantas.
Materia orgánica y agricultura
La materia orgánica es el abono básico para la producción de la agricultura orgánica , que además de respetar el medio ambiente, produce alimentos sanos, libres de abonos químicos, perjudiciales para el suelo y la salud humana.
Muchos agricultores y productores rurales, preocupados no sólo por la conservación de la fauna y la flora, sino también por la preservación del suelo y los recursos hídricos, utilizan la agricultura orgánica para producir alimentos puros y saludables, libres de agroquímicos, fertilizantes químicos y sustancias sintéticas que dañan el medio ambiente.
El Brasil ya ocupa una posición destacada en la producción mundial de alimentos orgánicos. Los certificadores nacionales emiten un sello de certificación orgánica, que garantiza el origen y la calidad orgánica de los productos.