Significado de la electricidad

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La electricidad es la rama de la física que tiene como objeto de estudio los fenómenos relacionados con la electrostática , la electrocinética y el electromagnetismo .

Según la ley de conservación de la energía, es una de las formas que puede adoptar la energía y que da lugar a múltiples fenómenos, como los caloríficos, mecánicos, luminosos, etc. Se basa en el movimiento de las cargas eléctricas , estando por lo tanto ligado al estado de los átomos del material considerado. Se dice que está en estado neutro cuando hay cargas positivas y negativas iguales en su interior, estando en estado positivo cuando hay una deficiencia de electrones y negativo cuando éstos están en exceso. Estos estados, a su vez, dan lugar a la aparición de fuerzas eléctricas de atracción y repulsión, dependientes de la señal de las cargas. Su intensidad es mayor que la de las fuerzas gravitatorias, originándose por medio de una adecuada distribución de esas cargas, lo que provoca la aparición de campos eléctricos a su alrededor.

El nombre de electricidad proviene de la palabra griega elektron (ámbar), debido al conocimiento que existía desde la antigüedad, observado, entre otros, por Tales de Mileto, del fenómeno de la atracción electrostática de los cuerpos de luz causada por un palo de ámbar previamente frotado (electrificación por fricción).

Corriente eléctrica

El libre desplazamiento de los electrones en el interior del material (un metal, por ejemplo) provoca la aparición de la llamada corriente eléctrica, que da lugar a diversos efectos físicos, como el efecto de Joule (calorífico), la electrólisis (química) o la inducción magnética (magnética).

El transporte de la corriente eléctrica, que puede ser, según su forma de propagación, alterna o continua, también puede tener lugar en condiciones adecuadas, dentro de los gases y los líquidos.

Electricidad y magnetismo

Existe una estrecha relación entre la corriente eléctrica y el campo magnético, ya que éste se genera por la presencia de cargas en movimiento y, a la inversa, su variación puede dar lugar a la aparición de una corriente eléctrica (inducción). La integración de los campos eléctricos y magnéticos da lugar al campo electromagnético del que se ocupa el electromagnetismo.

En 1826, H. C. Oersted descubrió experimentalmente la relación entre la electricidad y el magnetismo observando la desviación de una aguja magnetizada, causada por la influencia de la corriente eléctrica que corría por un conductor colocado cerca de ella. Poco después, F. Aragó magnetizó una aguja colocada bajo la influencia de un conductor enrollado en espiral; sin embargo, Ampère descubrió que las corrientes se atraen o repelen cuando viajan en la misma dirección o en direcciones opuestas, lo que le llevó a inventar el electroimán, abriendo así el campo al electromagnetismo.

En 1831, Faraday comenzó la transformación de la energía eléctrica en trabajo mecánico (inducción electromagnética), haciendo girar unos imanes previamente colocados junto a un circuito, lo que le permitió descubrir una nueva forma de generar electricidad y demostrar así la íntima relación entre ésta y el magnetismo.

Electricidad estática

La electricidad estática consiste en una forma de electricidad que está en equilibrio o en reposo, y por lo tanto no se mueve de un objeto a otro. El área de la física que estudia las cargas eléctricas en reposo es la electrostática.